Criptoanálisis en conflictos bélicos

Durante las guerras napoleónicas y otros grandes conflictos de la época, la criptografía no solo desempeñó un papel crucial en la protección de información, sino que también impulsó el desarrollo del criptoanálisis, el arte de descifrar mensajes cifrados sin conocer la clave. Las potencias militares comenzaron a reclutar expertos capaces de analizar y desentrañar los códigos del enemigo, una habilidad que se convirtió en una ventaja estratégica decisiva en el campo de batalla y en la diplomacia.

El avance de los métodos de cifrado fue acompañado por el perfeccionamiento de técnicas de ataque, como el análisis de frecuencias, que identificaba patrones en las letras más usadas en un idioma, y la búsqueda de repeticiones que podían revelar claves o esquemas de cifrado. Estas herramientas permitieron descomponer mensajes aparentemente indescifrables y marcaron un salto en la carrera entre la creación de códigos más seguros y las formas de romperlos. Este período sentó las bases de un criptoanálisis sistemático que sería fundamental en los grandes conflictos del siglo XX.